viernes, 4 de noviembre de 2016

Historia de los nobles caballeros Oliveros de Castilla y Artús d'Algarbe

Andamos por el siglo XXI sobre un cúmulo enorme de mentiras que acolchonan nuestra realidad y hacen aparentemente imposible que surja la inquietud de Dios. Miles de "leyendas negras" son proclamadas como verdades históricas hoy en día, reafirmadas por los medios de comunicación y la Academia. Algunos ejemplos de hechos históricos manchados de calumnia son la conquista española de América y la Inquisición española.

Del mismo modo, hay todo un periodo histórico incomprendido y malinterpretado para beneficio del progresismo, que acusa de malo e ignorante todo lo anterior a él para hacerse ver mejor y bueno: Se trata de la Edad Media. Poco me ha interesado la Edad Media desde que me enteré de su existencia en alguna clase de historia del colegio. Fue en la universidad, estudiando música, que el profesor nos la enseñó cuestionando la denominación injusta de "oscurantismo". Entonces, desde mi ignoracia, idealicé esta época tal como los Románticos del siglo XIX, abrazándola como un acto de rechazo a la razón. 

Más tarde vino mi conversión, mi llamado a la Iglesia Católica, la institución calumniada por excelencia. A la luz de la Verdad, profundicé en temas como mi herencia hispánica, pues antes de descubrir tu vocación, Dios te guía en el conocimiento de tus raíces y todas tus facetas. El estudio de España me llevó a un tomo de libros de caballería que había en mi casa recogiendo polvo. Lo he estado leyendo lentamente porque el español es antiguo y hay una gran cantidad de pies de página explicativos, pero sobretodo porque para involucrarse en la narrativa hay que cambiar de mentalidad. 

Gloria a Dios: Casi todo lo que la historia contemporánea desprecia y tergiversa es lo profundamente cristiano católico. Con toda razón, el Reino de Dios no es de este mundo.

Hasta ahora he estado leyendo la Historia de los nobles caballeros Oliveros de Castilla y Artús d'Algarbe. Se trata de los hijos del rey de Castilla y la reina de Algarbe que se convierten en hermanos tras la unión de sus padres. Ambos reyes son viudos, y se hace muchísimo énfasis en el amor y la fidelidad que le tenía cada quien a su esposo, tanto que por respeto no se casan con pompa. La historia sigue más que todo al caballero Oliveros, virtuoso y profundamente cristiano. No exagero... Sus hazañas son arraigadamente cristianas: desde pagar la deuda de un difunto para poder enterrarlo en tierras consagradas, hasta poner pena de muerte a cualquier soldado de su ejército que durante la toma de una ciudad (algo que también es justo), se atreva a tocar a una mujer. Oliveros toma prisioneros a los líderes enemigos, y los trata como los reyes que son, procurando razonar primero para el fin del conflicto. Él es humilde hasta los huesos, pero son sus actos los que hablan de su grandeza, él no tiene porqué hacerse propaganda, y jamás se cree su bondad y su capacidad de sacrificio. Hay pasajes en los que queda muy claro que Dios le da la fuerza, porque él es un frágil ser humano que no confía en sus méritos. 

Oliveros desposa a la bellísima princesa Helena de Inglaterra. La Inglaterra antes de la Reforma Protestante... Cuesta un poco imaginarla. Helena no es sólo muy hermosa. Me llamó la atención el perfil de mujer que es, porque soy también mujer, mujer de feminidad rota por haber nacido en este siglo podrido. Helena está siempre digna, conciente de su posición de princesa, pero a merced de la voluntad de su padre el rey. A pesar de amar a Oliveros a primera vista, Helena oculta sus sentimientos hasta que Oliveros junta los méritos y el rey decide por sí mismo comprometerla con él. Desde una cierta distancia, está siempre atenta y cuidando de su amado. Para enamorarlo se ocupa de ser virtuosa, porque él es un caballero virtuoso que crece en virtud para merecerla. 

¿Qué tal si así enamoráramos a nuestros hombres? Está comprobado a ciencia cierta que la mujer que no cede en virtud, gana el amor verdadero de un hombre que crecerá hasta ser digno de ella. He leído esos testimonios. 

No cuento la historia completa para invitarlos a que la lean. No niego que es un poco exagerado el estilo, y hay temáticas delicadas de moral, pero todo se resuelve cristianamente, se los aseguro. Si quieren hacerse una imagen certera de la Edad Media por favor, NO VEAN GAME OF THRONES NI LEAN "LOS PILARES DE LA TIERRA" O "EL NOMBRE DE LA ROSA". Si acaso lean las historias de tantos santos que dio aquel tiempo santo. 

El último mes

Mi querido y maltrecho Mac de segunda mano, que alegría me da estar acariciando tus suaves teclas, en comparación con las del enorme y profe...