lunes, 26 de marzo de 2018

Un paso más

El año pasado compuse muy pocas canciones, es más, llevo un par de años reciclando melodías y composiciones de cuando estaba en la universidad, puliéndolas y dándoles letras más afines a mi estilo de vida ahora. Ese no es el caso con esta canción que he decidido lanzar bajo el nombre de "Un paso más". 


"Un paso más" la compuse hace poco menos de un año, y la construí comenzando por las texturas del piano y la armonía, luego escribí la letra y finalmente hice la melodía. Mis canciones casi siempre salen de jugar con el piano hasta que algo toma forma y evoluciona, o cuando dos juegos se pueden unir para hacer algo interesante, como sucedió con esta canción, en la que la estrofa es una cosa y el coro otra. Los arreglos los hice sobre el proceso de grabación.  

Para la letra es distinto. Cuando era más joven escribía bastante poesía, por supuesto mala, como expresé en esta entrada: 
Y por lo tanto, tenía cuadernos llenos de material para escoger que le cuadrara a esta nueva música. Sin embargo, hace mucho que no escribo, y lo que ya está escrito pero sin usar no me gusta. Mis más recientes canciones tienen textos no escritos por mí. 

Dado lo dinámico y desenfadado de la música recién compuesta en "Un paso más", no podía ponerle un texto grave de poesía académica, tenía que ser un texto fresco y honesto. Decidí escribir sobre lo que me había pasado recientemente: Había pasado medio año desde que mi prometido y yo habíamos vuelto de Inglaterra, y no había perspectiva de casarnos. Eso me dolía en extremo y pasaba una que otra noche llorando sola, o llorándole a él por teléfono. Además de no haber pasado a ninguna convocatoria de empleo, el clima en el coro en el que estaba ya se había corrompido por alguna pelea grave que habíamos tenido. En general estaba sintiendo que todo lo que intentaba emprender fracasaba, y ya me empezaba a creer que jamás iba a salir adelante. 

Definí en mi mente estos sentimientos para poder escribir la letra cuando se me presentara la oportunidad, y cuando se presentó, me sentía bien y tranquila. Cuánto tiempo cultivando aquella pesadumbre, para sentarme a escribir con la esperanza refrescada. Es por eso que la canción tiene un giro optimista al final, y las estrofas comienzan conmigo sorprendida de que esté de buenas ese día. 

Me gustó tanto el resultado general, que mandé esta canción a un concurso del distrito a mediados del año pasado, pero no pasé ni a las finales. Seguramente es muy simple para lo que se espera en esas ocasiones. Nunca he pretendido deslumbrar técnicamente a la gente con mi música, lo que quiero es hacer música bella, pues tal vez alguien encuentre consuelo o paz en las creaciones que Dios me inspira. Es por esto que ya era hora de compartirla con el mundo. 

Dedico esta canción a todas las personas que se sienten estancadas o ante un obstáculo y sienten que no pueden más. 

El último mes

Mi querido y maltrecho Mac de segunda mano, que alegría me da estar acariciando tus suaves teclas, en comparación con las del enorme y profe...