miércoles, 30 de junio de 2021

Acerca de los 30...

 Ayer cumplí 30 años, llegué al tercer piso... Y mi esposo podrá atestiguar que no es que me resbalara, un par de veces me encontró con la cabeza entre las manos diciendo que los 30 me encontraban sin muchos logros que se esperan de una persona a esta edad. Pero bueno, él me tranquilizó haciéndome ver que no es como que cumplo 30 y aparece una pared o un policía, que no me van a permitir seguir esforzándome  para cumplir mis sueños, o crecer aún más como persona y mejorar en cada aspecto de mi vida.  

Una de las cosas que me asustaban de cumplir 30 era que uno cada vez es menos flexible, y me parece que a los 30 la personalidad ya está prácticamente completada y establecida. Mi mamá suele insistir en que entre más mayor uno, más difícil es corregir vicios y cambiar la forma de pensar, que al contrario, los rasgos se acentúan cada vez más. Estoy segura de que todos podemos observar esto en tíos, tías, abuelos y padres.  No obstante, ahora veo que mi mamá lo insinuaba en ambos sentidos: también lo bueno se va acentuando, y las virtudes que uno fomentó se empiezan a volver cada vez más fáciles de practicar, hasta que son completamente naturales. 

Es como mi abuelita que tiene Alzheimer. Ella toda la vida fue muy alegre y dulce, esa era su Luz Primordial, las virtudes que la caracterizaban, y ahora que no tiene idea de donde está parada, es solo alegría y cariño el 90% del tiempo (porque con toda razón, hay días en los que se asusta de no saber qué pasa y con quién está, pero son mínimos). 

Si en un principio me angustiaba saber que subo al tercer piso con un poco de mañas sin solucionar, solo tuve que reflexionar un poco para ver que también tengo características buenas muy específicas que brillaron en los altos, pero también de los bajos que he vivido, y no debería subestimarlas, sino servirme de ellas para seguir adelante. 

Es claro que ahora tengo mucha más vida y circunstancias y aventuras a las cuales referirme, en contraste con mi cumpleaños de 20. Hay mucha vida por delante, pero también hay una cantidad importante de vida atrás que hace que uno se sienta con peso, con profundidad. En este punto me siento ineludiblemente yo, y ya con los zapatos ablandados y acomodados para seguir caminando. 

Entonces cumplir 30 no fue tan malo...



No hay comentarios:

Publicar un comentario

El último mes

Mi querido y maltrecho Mac de segunda mano, que alegría me da estar acariciando tus suaves teclas, en comparación con las del enorme y profe...